FIN DE LAS VACACIONES

Aunque aún tengo dos días de vacaciones, siento que éstas ya llegaron a su fin, es que estar en casa no es lo mismo que estar fuera, acá ya hay tareas "semi" obligatorias que cumplir y eso le resta sentido de vacación, pero bueno, no me puedo quejar, tuve muchos días de relajamiento, ocio, y vida de turista, ha sido un buen tiempo.

Después de pasar varios días en casa, haciendo como que hacía algo :) me fui a Xela, estuve dos días ahí, bueno eso fue relativo, ya que uno de esos dos días fui a un lugar que se llama San Lorenzo, en el departamento de San Marcos, es un pequeño pueblo donde mi mamá trabajó por algunos años, ahí conoció gente a la que le tomó mucho cariño y siempre que puede va a visitarlos.  A mi hermano se le ocurrió que ese sería un buen lugar para celebrar los 81 años de vida de mi viejita, así que no tuvimos otra que ir hasta ahí.  El camino no estaba en las mejores condiciones debido a la lluvia y al poco cuidado que el gobierno le pone a esas rutas del interior del país, el vehículo sufrió algunos desperfectos que hicieron sudar a mi hermano, afortunadamente logramos llegar aunque con alguna hora de retraso.

El lugar es frío, estaba nublado y lloviznaba, sin embargo, la calidez de las personas del lugar era más fuerte y eso nos hizo sentir muy bien, la señora de la casa preparó un delicioso caldo de gallina, acompañado de tamalitos de masa y chile, la cosa más deliciosa, de beber nos dieron un té llamado María Luisa, me traje unas ramitas para preparar en casa, es delicioso. Además, fuimos a cosechar algunos elotes, los cocinamos y nos los saboreamos, tiernos, no hay como el maíz de tierra fría, el sabor es único!

En ese lugar nació uno de los presidentes de Guatemala, el General Justo Rufino Barrios, así que conocí otra de las propiedades del patrimonio nacional, la cuna del Reformador, así le llaman los lugareños. En el lugar no hay más que restos de lo que fue el mobiliario del dormitorio donde vio la luz del día por primera vez.

Después de esos dos días, partimos mi mamá, mi hermana y yo a Reu, ese lugar costeño, caluroso en extremo, pero el cual le sienta bien a mi mamá y por eso vive ahí, estuvimos 7 días, durante los cuales me dediqué a descansar, a comer y a leer, casi mi paraíso.  Si no hubiera sido por esos 33° C creo que todo hubiera estado mejor.  Sin embargo, acompañar a mi madre soporta cualquier sacrificio, ella ha vuelto a ser como una niña a la que hay que darle gusto, y a eso me dediqué estos días.

Así que, ya estoy de vuelta, de nuevo a la vida de esclavitud al trabajo, jaja, con la mente y el cuerpo descansado y revitalizado, no puedo quejarme, esto es más de lo que esperaba.

 Cartel colocado en la entrada a la habitación

 El General Justo Rufino Barrios

http://es.wikipedia.org/wiki/Justo_Rufino_Barrios

 Mobiliario de 1,835

¿Mesa donde la mamá daría a luz?

Nos queda la duda, nadie pudo aclararlo