Nunca se me hubiera ocurrido escribir algo sobre mi cumpleaños, pero haciendo honor a mi blog, acá estoy escribiendo una entrada relacionada con la fecha de mi nacimiento.
El 31 de marzo es un día muy especial para mí, siempre lo ha sido, desde que tengo uso de razón, es una fecha que está conmigo sólo una vez al año; el 31 de marzo y yo estamos ligados de manera perpetua, no puedo escuchar esa fecha sin pensar que es algo que me pertenece :)
Y como cosa rara, celebrarlo no ha sido de mi agrado, diría que en años anteriores hubiera querido que este día pasara desapercibido, y no porque me negara a envejecer, sino porque no me gusta ser el centro de atención, no sé cómo reaccionar ni qué decir, así que hasta hoy diría que realmente tengo el gozo de celebrarlo, y no porque hoy sí me guste ser el centro de atención :) sino porque reconozco el valor que Dios le ha dado a mi existencia.
Sé que la vida viene de Dios, creo firmemente que sólo a El puedo agradecerle estar aquí, claro que para eso El utilizó a mis padres, pero por mucho que ellos se hubieran afanado :) si no hubiera sido la voluntad de Dios, yo no hubiera nacido.
Así que hoy le agradezco a El la vida, los años que me ha dado y los que aún me dará; por lo que cada año ha traído a mi, especialmente a las personas, más que los bienes materiales con los que me ha bendecido, le agradezco por cada una de las personas que están en mi entorno, cercanas y lejanas, incluso por aquellas que no conozco físicamente pero que por medio de la tecnología virtual he llegado a amar, ¡gracias Señor! Nunca me cansaré de agradecerte por Tu obra en mi vida.